¿Es eficaz el acido retinoico para las arrugas?
Mientas envejecemos, lo más normal es que comencemos a notar como en nuestra piel comienzan a surgir leves arrugas, las cuales con el tiempo se vuelven cada vez más notorias. Al lograr observarlas, la mayoría de las personas comienzan a prestar un nivel mucho mayor de importancia a estos cambios, siempre teniendo en mente encontrar una manera simple, rápida, efectiva y muchas veces económica de lograr retrasar su llegada o incluso atenuar su apariencia.
En la mayoría de los casos, la respuesta suele hallarse en rutinas de cuidado de la piel, donde se sigue diariamente la aplicación de diversas sustancias y productos diseñados por un sinfín de marcas comerciales que han sido diseñados pensando en ser la solución ideal tanto para las arrugas como para cualquier otro problema estético que solemos asociar con el paso del tiempo y la llegada de la vejez.
A pesar de su gran acogida, la verdad es que existe una enorme cantidad de personas quienes prefieren no solo acudir a ellos, sino complementarlos o incluso sustituirlos por alternativas menos convencionales pero que aseguran resultados igual de efectivos. Entre estas opciones encontramos el ácido retinoico, una sustancia que muchos desconocen pero que día a día se va haciendo un hueco en el mundo de la belleza y el cuidado de la piel.
Qué es el ácido retinoico ¿Es lo mismo que el retinol?
Debido a las obvias similitudes en su nombre, muchas personas suelen creer que cuando hablamos de ácido retinoico nos referimos al retinol, una sustancia ya bastante conocida y aplicada como ingrediente en productos de cuidado de la piel. La realidad es que, si bien se trata de dos sustancias con nombre similar, el ácido retinoico es un producto que cuenta con ciertas diferencias que al ser tan marcadas hacen que sea necesario incluirlo en una lista y categoría bastante diferente.
El ácido retinoico, al igual que el retinol, son formas en las que encontramos la vitamina A, ambas sustancias entran en el grupo de retinoides (de ahí deriva la similitud en sus nombres). Cuando nos referimos al ácido retinoico, también llamado tretinoína estamos hablando realmente de la forma más activa que posee la vitamina A, sustancia de la cual ya probablemente hayas oído hablar en más de una oportunidad, ya que es bastante famosa en el área del cuidado cutáneo por la relación directa que posee con el colágeno.
De forma bastante general y debido a su condición de ser la forma más activa de la vitamina A vienen en una concentración y poder de acción mucho mayor que el retinol, por lo que su uso suele ser más destinado al área de la salud que de la belleza, ya que se ha demostrado que un uso ineficiente del mismo puede aumentar las posibilidades de desarrollar alguna clase de reacción adversa.
Esta cualidad hace que el ácido retinoico suela ser comercializado en algunos países solo a quienes cuentan con una receta médica que indique que será utilizado como tratamiento médico. Puede ser adquirido en farmacia, donde se le consigue en diversas presentaciones como capsulas, en forma líquida o en forma de crema o ungüento, siendo esta ultima la más común de todas. En cuanto a su concentración, puede hallarse en formatos que van desde el 0.10% hasta el 5%, dependiendo del uso al cual esté destinado el producto.
Principales usos y reacciones adversas
Si bien el ácido retinoico o tretinoína no es más que una de las maneras más eficientes y prácticas de conseguir la vitamina A y hacer llegar todos sus beneficios a nuestra piel y organismo, realmente su aplicación no es tan frecuente como otros retinoides, y su enfoque suele ser más dedicado a la medicina que a otras áreas donde la aceptación de los retinoides se da con mayor facilidad.
E el principal uso que posee se acostumbra sea en el área dermatológica, como un efectivo tratamiento contra el acné. La eficacia de este tratamiento se da debido a que la vitamina A presente en el ácido retinoico es un producto que posee importantes cualidades antibacterianas y cicatrizantes, que logran atacar la lesión tanto de forma externa sobre las marcas ya presentes como de manera interna sobre las lesiones que no han logrado surgir aún sobre la piel, algo que muchas otras cremas no logran hacer.
En esto lo normal es recurrir a las presentaciones comerciales que poseen una concentración y poder de acción más reducido, siendo las más comunes las que van entre el 0.10% hasta el 1% según sea el caso y nivel de acné y siempre dependiendo de la gravedad de la lesión, la edad del paciente y el tipo de piel que este posea.
La baja concentración del producto a aplicar se debe a que como en todo tipo de sustancia, no todo puede ser tan perfecto, y es que está bastante demostrado que el ácido retinoico puede llegar a ser un poco peligroso para la piel, principalmente cuando es aplicado de forma directa, en altas concentraciones o no es utilizado siguiendo las indicaciones adecuadas.
Entre las posibles reacciones adversas que puedes llegar a padecer si no aplicas correctamente el ácido retinoico, se encuentra la irritación en el área afectada, el enrojecimiento, aparición de sarpullido, o incluso el surgimiento de posibles quemaduras leves, las cuales pueden llevarte a requerir aplicar tratamientos extra para evitar en empeoramiento o la formación de cicatrices.
Por qué suele aplicarse como un producto anti arrugas
La vitamina A se caracteriza por contar con la importante capacidad de ayudar a nuestro organismo a mejorar la calidad que tiene el colágeno que este produce. Este aumento se asocia directamente al mejoramiento de la apariencia de toda la piel, ya que esta sustancia se relaciona directamente con la firmeza y elasticidad de este importante órgano de nuestro cuerpo.
Sumado a ello, la vitamina A es conocida por ser aplicada como una medida efectiva para ayudar a cicatrizar toda clase de heridas leves o superficiales ya que logra rellenar los tejidos afectados. Justamente esta función que resulta tan efectiva para la mayoría de las personas es la que ha inspirado a utilizar productos ricos en vitamina A en diversos tratamientos que buscan servir como ayuda para lograr combatir problemas estéticos como las líneas de expresión arrugas.
Como ya te lo hemos mencionado, el ácido retinoico es la manera más directa de acceder a esta vitamina, esto ha llevado a una gran cantidad de personas a darle un uso en esta rama, aplicándolo directamente el en área afectada para que penetre en la piel y logre actuar de manera mucho más directa y, por lógica general, en un periodo de tiempo más reducido que su contraparte, el retinol.
Además, algunas personas han dado un paso más allá al utilizar el ácido retinoico como ingrediente en preparados o recetas de cremas caseras, buscando de esta manera aumentar su efectividad o reducir los posibles efectos secundarios, un uso que realmente no podemos recomendar del todo ya que esta sustancia puede ser peligrosa para algunas personas, ya que se ha demostrado que puede llegar a irritar la piel muy rápidamente.
Es o no efectivo para prevenir o combatir las arrugas
El uso de ácido retinoico como sustancia para el tratamiento de las arrugas y líneas de expresión tanto leves como profundas va ganando día tras día más terreno. Al punto de que su efectividad ha sido puesta a prueba en diversas oportunidades y por una larga lista de estudios independientes que buscan conseguir determinar si vale o no la pena someter a la piel a esta sustancia.
Esto ha servido para demostrar que en realidad, el ácido retinoico o tretinoína es realmente efectivo en esta área, pudiendo asegurar resultados más eficientes tanto en tiempo de acción como en durabilidad que los que nos ofrecen otras alternativas como el conocido retinol que ya hemos mencionado en varias oportunidades a lo largo de nuestro artículo.
La diferencia en este proceso radica en la concentración, debemos tener en cuenta que el ácido retinoico viene en baja intensidad, debido a las reacciones adversas que puede proporcionar. –esto hace que con poca cantidad de producto logres alcanzar los resultados deseados en un periodo de tiempo bastante menor, siempre teniendo en cuenta que debes seguir al pie de la letra las indicaciones y modo de aplicación.
Las concentraciones más elevadas de ácido retinoico de igual manera pueden ser efectivas, al punto de que en la actualidad puedes encontrar tratamientos estéticos donde se da uso de esta sustancia en concentraciones del 1% hasta el 5% llevados a cabo por profesionales en la rama de la medicina estética, quienes aplican el producto siguiendo las recomendaciones adecuadas.
Un ejemplo de ello, es el peeling, un tratamiento donde se recurre al ácido retinoico en concentración promedio del 5%, pudiendo ser hasta un máximo de 10% para aplicar en la piel del rostro por un breve periodo de tiempo y lograr que la sustancia actúe sobre la piel, teniendo efecto de exfoliante químico y logrando blanquear la piel, reducir las manchas e incluso combatir las arrugas cuando estas son leves o moderadas.
Cómo aplicarlo en tu piel
Cuando vas a aplicar ácido retinoico en el rostro para combatir las arrugas, debes tener en cuenta que este producto requiere un uno bastante delicado, ya que la facilidad con la que algunos desarrollan reacciones adversas suele ser motivo de preocupación para médicos y expertos en el área de cuidado de la piel.
Lo primero que debes siempre considerar es la frecuencia de aplicación. El ácido retinoico es una sustancia bastante concentrada, por lo que el uso diario no está para nada recomendado ya que aumenta las probabilidades de que se desarrollen lesiones, sumado a que tu piel siempre va a requerir algo de tiempo para recuperarse antes de volver a recibir una dosis de esta sustancia y así lograr los resultados favorables que esperas tanto en la lucha contra las arrugas como cualquier otra función que estés considerando.
Lo recomendable en ese aspecto es que apliques ácido retinoico tan solo un par de veces cada semana, siendo lo ideal que esto sea una vez al día con 3 o 4 días de separación entre cada aplicación. Si usas concentraciones más elevadas el tiempo de espera jamás podrá ser inferior a los 4 días, en cambio con concentraciones mínimas podrás reducir la espera a 3 días, menos que eso terminaría causando una leve irritación en la piel.
Para poder aplicarlo en tu rostro, simplemente coloca un poco de ácido retinoico en tu dedos, de allí procede a extenderlo de forma uniforme sobre el área que quieres tratar, si es solo para combatir las arrugas, será suficiente con una cantidad muy pequeña de producto sobre cada una de las marcas que buscas cubrir. Si por el contrario deseas usarlo como un tratamiento más avanzado lo aconsejable es aplicarlo a modo de mascarilla.
Esta mascarilla no debe mantenerse en tu piel por periodos de más de 15 minutos, principalmente si estás utilizando cualquier concentración superior a la mínima de 0.10%. Para retirarla simplemente extrae el exceso con la ayuda de una toalla o paño seco, sin la necesidad de aplicar agua o jabón si tu piel no ha presentado ninguna debilidad aparente debido al uso de ácido retinoico o cualquier otra fuente de vitamina A.
Si has presentado alguna incomodidad mínima, lo aconsejable es no extender el periodo de la mascarilla por más de 10 minutos y aplicar agua templada y jabón natural al momento de retirarla de tu piel. Si la molestia aún persiste después de esta técnica, deberás suspender el uso de ácido retinoico y de ser necesario consultar a tu medico de confianza quien te indicará la mejor técnica de aplicación o si lo mejor será recurrir a otro tipo de tratamiento.
Consideraciones que debes tener en cuenta durante la aplicación
Cuando vas a aplicar cualquier producto delicado es necesario seguir ciertas recomendaciones o medidas, las cuales en su mayoría son indicadas por el medico dermatólogo al momento de recetar esta o cualquier otra sustancia. Pero, sumado a ellas hay ciertas recomendaciones que no debemos dejar de mencionarte para que logres los resultados deseados con el mínimo riesgo posible
Aplica esta sustancia acompañada de protector solar
El ácido retinoico tiene la cualidad de ser una sustancia fotosensibilizante, esto significa que tras su aplicación la piel se vuelve un poco más susceptible a verse afectada por los daños que causa la exposición prolongada al sol, más específicamente a los rayos ultra violeta que este produce. Por esta razón si piensas exponerte al sol después de aplicar ácido retinoico es importante que te dediques algo de tiempo para tomar las precauciones adecuadas.
Sin importar la concentración de ácido retinoico que hayas decidido aplicar, deberás siempre cubrir la piel de tu rostro con una capa de protector solar, el cual deberá aplicarse después de la mascarilla de ácido retinoico. Este protector deberá contar de forma obligatoria para asegurar su efectividad con un índice o FPS de al menos 30, con el cual lograrás evitar que los rayos UV penetren en tu piel y causen estragos en ella.
Antes de aplicar el ácido retinoico, humecta tu piel a profundidad
Otra desventaja que posee el ácido retinoico es que puede resultar un tanto irritante al punto de lograr resecar la piel de algunas personas, esto debido al alto poder de acción que posee. Para remediar este obvio problema no se requiere un esfuerzo demasiado grande, sino que será suficiente con que apliques una pequeña recomendación siempre antes de comenzar a colocar esta mascarilla en tu piel.
Un poco de crema humectante deberá ser más que suficiente para lograr crear una especie de capa protectora que ayude a que tu piel no entre directamente en contacto con el producto y así conseguir que los beneficios de la vitamina A que nos regala el ácido retinoico logren entrar a la piel, sin que esta se vea demasiado afectada por los puntos negativos con los que cuenta esta estupenda pero delicada sustancia.
Almacena el ácido retinoico correctamente entre cada aplicación
Algo que la mayoría de médicos suele olvidar al momento de recetar esta sustancia es recomendar a sus pacientes la manera más adecuada de preservar sustancias delicadas como el ácido retinoico. Este punto por simple que parezca realmente representa un factor bastante importante que no se debe dejar de lado ya que de él depende que la sustancia no vaya poco a poco perdiendo su efectividad o que se vea alterada en sus funciones.
Lo ideal es que el ácido retinoico sea bien almacenado, esto sin importar la presentación que has adquirido. Lo aconsejable es que lo almacenes en un lugar oscuro, donde la luz solar no dé directamente sobre el envase ya que esta puede dañar el producto en su interior. Además mantén tu ácido retinoico alejado de sustancias con fuerte aroma y fuera del alcance de mascotas y niños quienes puedan tomarlo como juguete.
Si te ha gustado nuestro artículo pero has quedado con ganas de aprender un poco más acerca de este estupendo producto y sus posibles usos, te invitamos a consultar nuestro tema especial titulado Para qué sirve el ácido retinoico
Como lo habrás notado, el ácido retinoico no solo funciona como un tratamiento alternativo para la lucha contra las arrugas, sino que es bastante recomendado al punto de ser aplicado por expertos en el área del cuidado de la piel. Así que si estabas considerando hacerte con un poco de esta sustancia te invitamos a que lo intentes, sigas las recomendaciones al pie de la letra y comiences poco a poco a notar como los increíbles beneficios de la vitamina A llegan a tu piel de forma realmente muy concentrada.